
Armadura de Hueso
Armadura de Hueso
Presentamos una selección de poemas de Armadura de Hueso, poeta nariñense.
INCORPÓREO/ CORPÓREO
Sueño de idea, piénsame.
Espectro dimensional, evócame.
Axioma sensorial, pálpame.
Rezo de tinta, háblame.
Falange intuitiva, escríbeme.
Y al final del recorrido desborda los límites de la piel.
Te escribo y te describo en la negritud de lo gélido,
te busco y te conduzco por los parques nocturnos
en los ruidos que no entiendo,
con el peso de las ánimas.
Te susurro y te reclamo
en la adversidad de los árboles que cuentan dolores,
que suenan a cementerio de hojas y besos.
Te aúllo,
y a tu nombre condeno a viajar,
suspendido,
entre el relámpago de mis alas.
Y sí,
me hastío de los espejismos delineados por el paisaje habitual.
Los enjambres espectrales,
se resguardan de la cosificación estridente.
Privilegios la soledad y el silencio,
fósiles en el panteón de los saberes ancestrales.
De esa saciedad de insatisfacciones,
que desuella las vértebras de la creación,
en sus instantes necios de despabilado ensimismamiento.
Desquiciada impotencia de no reencontrar
aquel albor de algún heraldo siniestro,
que me revuelque en su turba clarividente.
A cambio,
vicios y manías,
las putrefactas autorrecompensas mundanas,
mórbidas de satisfacción.
Los poemas no se entregan,
se tiran a la cara,
se sacuden la empolvada imaginación del mundo,
y mueren.
Los poemas son ideas desobedientes,
gotas que salpican su aliento sobre los techos mentales.
Indiferentes a las lenguas que se arrastran.
Entre espesos divagares,
son penumbra,
recreándose en materia,
ante la insignificancia que se distingue.
Dispersas bagatelas registran los paradigmas de la rebelión.
Te pedí que vinieras,
que me mires
y me conviertas.
Mi vientre, la copa de tu fuego,
Mis ojos, umbral de todas tus apariciones,
Mi boca, traducción de tu imagen disoluta.
Porque deseo abocarme en tu abismo profano,
ver lo infra o lo supra humano,
o,
solo deseo.
Solo consumir deseo,
lo que te permite levitar,
y hablarme entre voces sin lengua.
Invítame,
invéntame.
Hazme regocijar en el festival de tu blasfemia.
Jessica Díaz Nandar, bajo el seudónimo “Armadura de Hueso”, es una escritora colombiana nacida en La Unión, Nariño. Además de su pasión por la escritura, es abogada de la Universidad de Nariño y técnica forense, ESACAUCA.
Su obra poética ha impactado en eventos literarios nacionales e internacionales, incluyendo su declaración como “Poeta revelación más destacada” y “Poeta más destacada del Sur occidente colombiano” en 2019 y 2021 respectivamente por la Corporación Prensa Correo del Sur. Su trabajo literario ha abordado la poesía, el aforismo y la declamación. Ha contribuido en diversas antologías y revistas literarias. Es autora de los libros Del despertar de otros sentidos (2019), Despliegues (2021), Desperdicios de vacío (2025) y del proyecto de poesía musical “Letra en relieve”.